Por una invitación de Ediciones Sudestada, proyecto autogestivo que edita una revista de análisis político, sube a la web trabajos de investigación y publica colecciones literarias, recopiló en un libro la experiencia iniciada hace un tiempo por el escritor Osvaldo Bayer, cuando propuso quitar del centro porteño la estatua gigante de Julio Argentino Roca, la más grande de la ciudad. Pero Desmonumentar a Roca es mucho más que eso. En el trabajo, Marcelo Valko se mete con el imaginario que las clases dominantes impusieron para moldear una cultura criolla, a partir del genocidio de las campañas al desierto. Y lo hace describiendo los buenos deberes de los "escribas de la élite", que supieron imponer "una" Argentina a partir de sembrar moles de cemento con sus héroes, regalarles nombres de avenidas y dibujarlos en Billiken y Anteojito. "Nada es más peligroso que una estatua, en su aparente inmovilidad", dice Valko. Y agrega: "La gente no repara en eso...